lunes, 25 de mayo de 2015

Contempt

Contempt [Il disprezzo] (NYRB Classics, 1999)
by Alberto Moravia [translated from the Italian by Angus Davidson]
Italy, 1954

For a no nonsense, stripped down character study about an imploding marriage with virtually no show offy writing other than the occasional extravagant simile and, OK, some masterful psychoanalytic meta engagements with the Odysseus/Ulysses of Homer, Dante, Joyce and Freud, one of the things I most liked about immersing myself in the sea of Contempt's flat prose and suffocating interiority was watching the author heedlessly row himself out as far from shore as possible and then seeing if he could return without crashing onto the rocks of novelistic banality.  Heroic?  Not exactly.  However, it's probably a measure of Moravia's success in the realm of the "boudoir drama" (142) that even Madame fucking Bovary has a more uplifting ending as concerns the "conjugal repugnance" (141) theme!  Whatever, while I suspect that this quick reading but somewhat humorless novel is all too successful a neorealist-like downer for me to ever consider rereading without Technicolor happy pills in hand, two things that make me hedge my bets on that front are Moravia's ironic mean streak in selecting a writer as the poster boy for a self-absorbed intellectual emotionally impotent in the face of his true feelings for another human being (Riccardo Molteni on his wife Emilia: "And so, between us, there was a silence that was only broken from time to time by some quite unimportant remark: 'Will you have some wine?  Will you have some bread?  Some more meat?'...It was, then, a silence that was intolerable because perfectly negative, a silence caused by the suppression of all the things I wanted to say and felt incapable of saying" [116-117, ellipses added]) and a couple of profoundly moving hallucination scenes near the end which touch on the rational and the irrational at the heart of loving somebody while conjuring up the fabled wine dark sea of Homer in primal opposition to modern man's more prosaic and less poetic realities.  Powerful and perceptive but maybe not the perfect book to read if you're currently sleeping alone or have ever lost the girl (or guy) of your dreams to those capricious goddesses known as "Fate."

Alberto Moravia (1907-1990)

martes, 5 de mayo de 2015

Indios, ejército y frontera

Indios, ejército y frontera (Siglo XXI Editores, 1982)
por David Viñas
México, 1982

A veces aburrido y a veces divertido, Indios, ejército y frontera aún así se trata de un ensayo histórico valioso sobre los orígenes y los ejes del poder en la Argentina visto desde el punto de vista de "la cuestión india".  Quizá "aburrido" y "divertido" no sean las palabras adecuadas para evaluar la obra provocadora de Viñas porque el autor, un argentino que tuvo que escribir su libro en el exilio a causa de la dictadura militar de los setenta y ochenta también responsable de "desaparecer" a dos hijos suyos, aumenta las apuestas políticas y polémicas al principio de su obra por preguntar si "el discurso de silencio" en cuanto a los indígenas en la historia argentina no se debe al hecho de que los indios "fueron los desaparecidos de 1879" (12).  En todo caso, no es que falten anécdotas o perspectivas interesantes dentro del libro: citando a un tal Amadeo Jacques, por ejemplo, Viñas escribe de un cacique del Chaco que "había comido corazón de tigre y corazón de víbora para hacerse invulnerable a las balas" de una de las numerosas "expediciones blancas" a la región (120); en otra parte, el historiador ofrece una crítica tajante del cambio de énfasis hacia los indios en menos de una generación desde la publicación de Facundo de Sarmiento hasta la llamada Conquista del Desierto fomentada por el Ministro de Guerra Julio Argentino Roca: "Lo de civilización y barbarie aparece initialmente unido por una 'y' copulativa, hacia el momento de Roca el sentido se desplaza hacia una 'o' disyuntiva.  La síntesis se hace dilema".  ¿Lo importante de esto según Viñas?  "La integración que corre por cuenta del 'civilizador' se desplaza hacia el 'bárbaro' que debe convertirse o desaparecer; adscribirse a los valores del conquistador, en identificatoria sumisión, o perecer" (73).  Una lectura fuerte e inquietante en cuanto a su análisis del "indofobia" (27) y del "asesinato racial en la Argentina" (44) del siglo XIX, y además, una obra igualmente fuerte e inquietante en cuanto a su visión de la Argentina del siglo XX: "Si se analiza la historia argentina desde una amplia perspectiva, resulta evidente que sus mayores dirigentes siempre fueron militares o latifundistas.  Lo excepcional ha sido lo contrario...  Y por cierto que esa secuencia podría prolongarse hacia la actualidad enhebrando tanto a Yrigoyen como a Perón (para asumir la vertiente populista) o a Uriburu, Aramburu, Onganía o Videla si aludimos a la franja autoritaria" (197).  Acertado.

David Viñas (1927-2011)